El derbi entre ayamontinos e isleños, transcurrió con total normalidad y deportividad a excepción del trio arbitral que vio, pero no quiso pitar, las jugadas claves del encuentro que a continuación reseñamos.
En la primera parte, un balón centrado al área por los locales es controlado con un jugador canelista con la mano en el borde del área pequeña y termina en gol. En los primeros minutos de la segunda mitad, pita un penalti a favor del conjunto local, que el guardameta Dani en una gran intervención logro despejar a córner. Minutos después una contra bien llevada por el isla, el esférico cae en los pies de Sebas que regatea a varios contrarios y transforma el empate.
A mediados de esta segunda mitad, un fallo defensivo de la defensa isleña es aprovechado por los de Pastoriza y vuelven adelantarse de nuevo 2-1. A partir de eses instante empezó el espectáculo bochornoso de los de negro. Jugada de Sebas por banda que es derribado por detrás dentro del área cuando se disponía a tirar a gol, penalti claro que se fue al limbo. Acto seguido Tomas en jugada personal se adentra hasta la línea de fondo centra y Mellao que viene desde atrás fusila al portero. Increíble pero cierto, gol anulado por fuera de juego. Los jugadores del isla protestan ante tanta desfachatez arbitral y son expulsado, Sebas y Mellao. Finalizando el encuentro ante la indignación de todos.
Si hace unos días vimos como a un árbitro por equivocarse en un penalti no señalado le cayó un mes en la nevera. A este y a sus jueces de línea habría que meterlo en un congelador de cinco estrellas hasta el día de su jubilación deportiva.
No hay comentarios:
Publicar un comentario