Una vez más fueron muchas las personas que se congregaron alrededor de la Casa Hermandad, en la Plazoleta San Francisco, para escuchar el canto de la Salve a nuestro Bendito Simpecado, incluyendo a un sacerdote muy apreciado por nuestra Hermandad como es D. Jesús Toro y máxime cuando se sabía que era Francisco González quien lo iba a hacer, acompañado a la guitarra por José Antonio Monclova Rodríguez.
Dos personas muy vinculadas y comprometidas con la Hermandad desde muy pequeñitos y que saben transmitir a la hora de cantar todo el sentimiento cristiano que envuelve la vida de un rociero. Y así, con esa prodigiosa voz que Dios ha dado a Paco González, con las primeras notas de la guitarra, rompió el silencio cuando alzó al cielo... "Dios te salve" de Los Romeros de la Puebla. Una Salve que, sin duda, refleja el camino que debe seguir un buen cristiano para alcanzar las marismas eternas y que Paco González pregona como rociero y cristiano que es.
Y luego las sevillanas, como siempre muy bien escogidas porque a Paco, me consta que le gusta y que intenta con ellas dar a conocer cuál es el sentimiento del verdadero rociero y con ello quitar la imagen que muchas veces la gente en general tiene del Rocío sin haberlo vivido. Y, por último, invitó a José Antonio Monclova a que cantara una sevillana que sin nombrarlo, dedicó a un rociero que ya camina por las marismas del cielo y al que se unieron, cantando, muchos de los presentes.
En definitiva, una noche más en la que alrededor de la Virgen se produce esa magia que los buenos rocieros saben reflejar y que contagia.
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